Yoganidra, relajación profunda en conciencia plena, la meditación yin del futuro
Si practicas yoga seguro que más de una vez, después de una sesión de āsana, has deseado quedarte más tiempo en śavāsana, para integrar los frutos de la práctica y abandonarte, en tu esterilla, a esa relajación tan profunda y reparadora que se abre en ese momento de forma natural. Con el Yoganidra nos regalamos ese espacio y nos permitimos sumergirnos durante 30-45 minutos en el océano de nuestro interior, bajo la guía del instructor y en la inmovilidad de la postura de śavāsana. Yoganidra es el arte meditativo del śavāsana.
Pero, el Yoganidra es mucho más que un śavāsana extendido en el tiempo, y mucho más que una técnica de relajación. Además de una Técnica de relajación y meditación guiada, sumamente restaurativa, Yoganidra es el nombre del Estado de conciencia que se abre en el umbral entre el sueño y la vigilia, cuando accedemos a él a través de la Relajación consciente, sin dormirnos. Por eso es muy difícil hacer autopráctica de Yoganidra. La guía del instructor nos permitirá mantenernos conscientes en este estado de duermevela, sin caer en la dispersión mental o en el sueño. Así podremos soltar el control y entregarnos al espacio silencioso donde sucede la restauración natural del sistema.
La palabra yoga-nidra significa en sánscrito «sueño yóguico», es decir, «sueño consciente». Si logramos penetrar y permanecer en este estado manteniendo la conciencia despierta, y enfocándonos en lo que sentimos interiormente, la mente se irá calmando y nuestro cerebro irá entrando en ondas Theta. En este estado y sin esfuerzo, se van disolviendo las tensiones físicas, las cargas emocionales e incluso aquellos patrones inconscientes que nos están bloqueando y causando sufrimiento.
¿Por qué practicar Yoganidra?
Esta técnica opera en tres niveles de profundidad: en primer lugar, es muy adecuada para aliviar el insomnio, la ansiedad, el estrés y, en general, los bloqueos físicos, emocionales y mentales. En segundo lugar, nos ayuda a desarrollar la maestría interior, ya que permite tomar conciencia de creencias y patrones limitantes y descubrir vías para soltar viejos hábitos, reprogramar nuestra mente y mejorar nuestra experiencia de vida. Por último, en su sentido último y esencial, el Yoganidra es una forma de meditación yin que, a través de la rendición, la entrega y la receptividad total, nos abre a la dimensión del Ser-Presencia que en esencia somos, la Conciencia única que todo lo abarca, la Fuente y Fundamento de la creación. Con la práctica de Yoganidra aprendemos el arte del no hacer, de soltar el control sobre el cuerpo y la mente, entonces la restauración del sistema sucede de forma natural.
¿Cuáles son los Beneficios del Yoganidra?
El Yoganidra tiene muchos beneficios, a nivel fisiológico, mental, emocional y espiritual. Al permitirnos tomar conciencia de contenidos y patrones de nuestra psique hasta entonces desconocidos, podemos abordarlos desde una perspectiva más amplia e integradora, que nos permite poder gestionarlos mejor y trascenderlos. Esto repercute en el incremento del bienestar general de la persona y en una mayor capacidad de dirigir su vida, de forma más consciente, auténtica y constructiva.
Algunos de los beneficios del Yoganidra son:
- Relaja nuestro cuerpo físico, aliviando contracturas y dolores.
- Ayuda a combatir el insomnio (1 hora de Yoganidra equivale a 4 horas de sueño reparador)
- Calma la mente y reduce los niveles de estrés y de ansiedad.
- Mejora el estado de ánimo, la energía, la voluntad y la autoestima.
- Abre nuestra intuición para la toma de decisiones y la resolución de problemas vitales.
- Ayuda a mantener el centro y el equilibrio en momentos de crisis o transición.
- Mejora la memoria, el aprendizaje y la creatividad.
- Permite liberar y sanar memorias enquistadas, mejorando así la salud psicológica.
- Propicia estados meditativos profundos.
¿Cuál es el origen del Yoganidra?
El Yoganidra proviene de la tradición milenaria del tantra hindú, especialmente de la práctica nyāsa descrita en los antiguos textos de la tradición tántrica, con más de mil años de antigüedad. Swami Satyananda, a principios del siglo XX, la recuperó y la adaptó a nuestras necesidades actuales, conservando su esencia filosófica y espiritual.
En el marco de la tradición del Yoga de Patañjali, se considera el Yoganidra como una práctica de pratyāhara (introversión o abstracción sensorial) que facilita la transición de la práctica externa (ética, física y energética) a la práctica interna o meditativa.
El esquema clásico de Satyananda, como sucedió en el caso de Krishnamacharya con el hatha-yoga, asentó las bases para el desarrollo de nuevas formas de Yoganidra: desde las más creativas hasta las orientadas a fines terapéuticos específicos. Nuestra escuela ofrece un estilo de Yoganidra basado en el mapa de los cinco kośas o envolturas del alma: físico, energético, psíquico, intuitivo y causal.
¿Cómo se practica Yoganidra Síntesis?
Yoganidra Síntesis es un Viaje por nuestro universo interior en el que purificamos y armonizamos estos cinco cuerpos, para finalmente entrar en comunión con el corazón espiritual, donde se produce un gran descanso y restauración de todo el sistema.
Tumbados, con los ojos cerrados, seguimos la guía del instructor. En primer lugar, relajamos el cuerpo físico mediante diversas técnicas de relajación, respiración y una rotación completa de la conciencia por el cuerpo. En la siguiente fase, se enfoca la atención en la respiración y el cuerpo energético. Gradualmente entramos en un estado onírico-consciente (similar a un sueño lúcido) donde se van manifestando sensaciones cada vez más sutiles y contenidos emocionales, mentales, e incluso arquetípicos. La emergencia de contenidos inconscientes a la luz de una conciencia expandida, ecuánime y receptiva nos permite abrazarlos, liberarlos y, en ocasiones, nos regala comprensiones o intuiciones muy reveladoras. Con un buen trabajo de integración posterior, las sesiones van dando su fruto y se van produciendo mejoras en nuestras formas de percibir la realidad, de experimentar la vida y de relacionarnos con los demás y con nosotros mismos.
La sesión es todavía más efectiva cuando se combina con la técnica del samkalpa. El samkalpa es un decreto verbal interior, conciso, claro y afirmativo (un mantra personalizado) que tiene la función de reprogramar la mente y activar aquella cualidad que queremos potenciar en nosotros mismos. Las sesiones pueden acompañarse de nāda-yoga, con cantos armónicos y diversos instrumentos, como los cuencos tibetanos, cuya vibración armoniza y facilita el proceso.
Así que, Relájate, respira y deja que suceda…
Por Laia Villegas